La isla de Murano, en Venecia

Situada a poco más de un kilómetro de la ciudad de Venecia, en la región del Véneto, Murano es una bella isla ubicada al noreste de Italia. La isla, a su vez, está integrada por otras siete pequeñas islas que se hallan divididas por canales y ríos, pero que están comunicadas todas entre sí mediante puentes.

Su nombre es conocido en todo el mundo gracias a su producción de vidrio artístico artesanal, que se realiza mediante la técnica del soplado, y con la que se crean vasos, copas, lámparas y todo tipo de adornos. Además del famoso Museo del Vidrio de Murano, en la isla hay varios talleres artesanales donde se trabaja el vidrio soplado y que se pueden visitar.

Al margen del negocio del cristal, la isla merece la pena ser visitada por contar con una peculiar distribución de calles/canales que la hacen casi tan atractiva y romántica como la ciudad de Venecia.

Qué ver en Murano

Cono no podía ser de otra forma, la visita más popular es la que se realiza al Museo del Vidrio, que se encuentra situado en el Palazzo Giustinian, justo en el centro de la isla. En él, además de poder apreciar la evolución que ha experimentado la técnica de la elaboración de cristal de Murano, también disfrutaremos de una magnífica colección de objetos de cristal, que abarca desde la época egipcia hasta el presente.

Hay otras visitas que son muy recomendables en esta isla italiana, como la de la Iglesia de Santa María y San Donato, en la que se dice están conservados los huesos de un dragón que mató San Donato; la Iglesia de San Pietro Martire o el Palacio da Mula.

Y de vuelta al cristal de Murano, hay varias fábricas donde lo elaboran. Y no hace falta que las busques, porque te buscan ellos. Es de lo más normal que por la calle te inviten a visitar alguna para que puedas ver cómo se sopla el vidrio, y para que luego te pases por la tienda para tentarte con comprar algo.

Comer en Murano

Al igual que sucede en Venecia, aquí prima la cocina tradicional de la región del Véneto. Es rica en productos del mar, como mariscos, crustáceos, moluscos y pescados. Son muy populares el moscardino, una especie de pulpo muy pequeño; la schilla, que es un crustáceo; las gambas de río, criadas y pescadas en la zona desde hace muchos años, o las lubinas. Para los que prefieran los platos cárnicos, aquí se preparan, sobre todo, con carnes blancas. Y en esta región se prepara un delicioso paté de ganso, además de embutidos y salchichas.

Una de las recetas más típica de la zona es la polenta, que se puede preparar de varias maneras. Las más populares son la que lleva bacalao desmenuzado y cocido en aceite y leche, y la polenta con osei, que son pajaritos envueltos en tocino que se saltean con aceite y salvia. Otro plato tradicional es el arroz caldoso. Y por lo que se refiere a los dulces, la lista incluye los zaleti, las alubias a la veneciana, los bussolai, los sagagiardi, la nicolotta y la pinza.

Si visitas Venecia, siempre puedes coger las líneas 41, 42, DM y LN del vaporetto, un autobús acuático, y acercarte a conocer la isla de Murano.