Varese, una ciudad italiana rodeada de lagos

La ciudad italiana de Varese es un destino perfecto para los amantes de la naturaleza, y también para los aficionados al astroturismo. Ejerce como la capital de la provincia homónima, en la región de Lombardía, y posee una situación privilegiada junto al Sacro Monte di Varese (Sagrado Monte de Varese), que está integrado en el Macizo del Campo dei fiori (Campo de las Flores).

En esta villa se halla la sede de un observatorio astronómico, y también el Centro Geofísico Prealpino. A su alrededor se extiende un panorama natural de montañas, lagos y bosques. Y cualquier momento es bueno para visitar la ciudad, que va variando de colores según la época del año. El mes más caluroso del año es julio, con una temperatura media de 20 grados, mientras que enero es el mes más frío, con una media de 2 grados. El mes más seco es enero, y el más lluvioso es el mes de junio.

Toda la provincia de Varese es altamente recomendable para los aficionados a la naturaleza. Podrán ver una decena de lagos de origen glacial, entre los que se hallan el lago de Varese, el lago Maggiore, el lago Ceresio o el lago Verbanio, y ríos como el Olona y el Ticino. Y es hermoso ver la sucesión de valles, todos ellos surcados por senderos ideales para ser recorridos a pie, a caballo o en bicicleta.

Qué ver en Varese

A Varese se la considera como una ciudad-jardín, ya que cuenta con grandes espacios verdes repartidos por toda la villa. En torno a ellos surgieron, a partir del siglo XVIII, bonitas villas que a su vez están rodeadas por cuidados jardines, los cuales constituyen uno de los mayores atractivos de la ciudad.

Espectacular es el Palazzo Estense, construido en el año 1766 siguiendo el estilo barroco. Sus maravillosos jardines son uno de los lugares más visitados de esta ciudad italiana.

Resulta muy recomendable la subida a lo alto del Campo dei Fiori. La parte superior de esta boscosa montaña constituye un privilegiado mirador panorámico sobre el valle del Po, y un observatorio estupendo para contemplar algunos de los más bellos lagos italianos.

Homenaje gastronómico en Varese

En la provincia de Varese se elaboran algunos de los productos más exquisitos de Italia, como los quesos Gorgonzola Dop o la Formaggella. De esta zona son también típicos el Violino de cabra, un jamón que se obtiene de los muslos de cabra o de oveja; los dulces artesanales Brutti e Buoni, elaborados con clara de huevo, almendras dulces, avellanas y vainilla, o la miel Millefiori y la miel de castaño.

Otras especialidades locales son los Mustazzitt, unos bollos que tradicionalmente los peregrinos dejaban en el santuario del Sacro Monte; la lombarda cazouela, un guiso de carne de cerdo y berzas, o la rusticana, que tradicionalmente se ofrecía como agradecimiento al final de cosecha a todos los que habían colaborado en ella.

Y una última recomendación: si visitas Varese, no olvides mirar al cielo por la noche. La limpieza de los cielos nocturnos permite disfrutar de un gran espectáculo estelar, especialmente desde la zona donde se encuentra el Observatorio Astronómico del Campo dei Fiori.