La mítica ciudad de Pompeya, en Italia
Muy cerca de Nápoles se encuentran las famosas ruinas de Pompeya, un antiguo pueblo romano que permaneció oculto bajo las cenizas del volcán Vesubio hasta el año 1748.
Fuente de la imagen: National Geographic
En la provincia de Nápoles, no muy lejos de la ciudad de Roma, se encuentra la localidad de Pompeya. Está situada en la llanura del río Sarno, y la moderna población convive con las ruinas de la mítica villa romana que quedó sepultada tras una erupción del monte Vesubio, en el año 79 d.C. Declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son uno de los lugares más visitados del planeta.
La actual Pompeya se desarrolló en el siglo XIX en torno al Santuario de la Virgen del Rosario de Pompeya o Beata Vergine del Rosario di Pompei, un importante centro de peregrinación en Italia.
Si piensas visitar esta ciudad italiana ten en cuenta su clima mediterráneo. Su proximidad al mar le proporciona unas suaves temperaturas, aunque pueden experimentar grandes variaciones ocasionales en invierno. La temperatura media invernal es de 8 grados centígrados, mientras que en verano es de 23 grados.
Fuente de la imagen: Sito ufficiale del turismo in Italia
Qué ver en Pompeya
Sin duda el principal lugar de interés en Pompeya son las ruinas de la ciudad romana. Ocupan una gran extensión, y para recorrerlas en su totalidad se necesitará casi todo un día. Podremos ver varios templos, un foro o lujosas viviendas decoradas con frescos y mosaicos. También podremos visitar un lupanar, un prostíbulo de la época con toscas camas de piedra y frescos con temas eróticos.
Es curioso pero, a pesar de la violencia de la erupción del volcán Vesubio, los restos de la villa se encuentran en bastante buen estado, por lo que su estado actual recuerda a una ciudad fantasma. Es impresionante recorrer lugares como el anfiteatro, la Palestra Grande, el Teatro Grande, la Casa del Fauno, el Foro, el Templo de Apolo, la Villa de los Misterios, el Templo de Júpiter, la Basílica, las Termas del Foro y la Casa del Poeta Trágico, además del Anticuario, que es la zona del museo.
Una de las visitas más impresionantes es la de la exposición de las figuras de los ciudadanos que quedaron atrapados por las cenizas, los cuales todavía reflejan en sus rostros el espantoso terror que vivieron.
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Comer en Pompeya
En algún momento tendrás que recuperar fuerzas, y será entonces cuando descubras la magnífica cocina tradicional napolitana. Son ingredientes habituales en sus recetas los pescados y mariscos, así como el pomodoro (tomate), que aromatiza platos como la popular pizza.
Otros platos tradicionales de esta zona de Italia son la pizza marinara y la pizza Margherita. En Pompeya las pizzas se cocinan en horno de leña para sacarlas más sabor y obtener una masa súper crujiente.
Otras receta típicas son los spaghetti al pomodoro, pasta cocinada “al dente” y acompaña con salsa de tomate, o los spaghetti a vongole, que incorporan almejas. No dejes de probar el risotto, arroz con carne de buey y trozos de jamón aliñado con pimienta y verduras, o la salsa Ragú. Y de postre, la sfogliatella, un dulce de hojaldre con forma de cola de langosta relleno de crema pastelera o pasta de almendras.
Fuente de la imagen: Viaja con Libertad
Sólo por el hecho de poder contemplar las ruinas de la antigua villa romana de Pompeya, ya merece la pena viajar a esta ciudad italiana. Estos impresionantes e inquietantes restos históricos reflejan toda la violencia del monte Vesubio, que experimentaron las actuales zonas arqueológicas de Pompeya, Herculano y Torre Annunziata.
