Villasimius, el pueblo con las mejores playas de Italia

Bajo el peculiar nombre de Villasimius se esconde uno de los mejores destinos de playa de Italia. Se encuentra situado en la costa sur-oriental de la isla Cerdeña, y su principal atractivo radica en contar con hermosas playas de arena dorada y aguas transparentes, rodeadas por una maravillosa y aromática naturaleza formada, sobre todo, por mirtos y enebros.

Para ir a este paraíso costero hay que dirigirse a la provincia de Cagliari, en la región de Cerdeña, y lo hallaremos a tan sólo 35 kilómetros al este de la ciudad de Cagliari. A su término municipal pertenecen dos islas, la Isla dei Cavoli y la Isla de Serpentara. El nombre de esta última se debe a la forma de serpiente que posee su costa oriental.

Es éste un buen destino para cualquier época del año, ya que su clima mediterráneo le proporciona a la esta isla italiana unos cielos despejados la mayor parte del año. Hay que tener en cuenta que en verano la temperatura pueden llegar a ser muy alta, sobre todo por la tarde, aunque cuando sopla el Mistral suele descender de forma considerable.

Qué ver en Villasimius

Uno de los lugares más interesantes de Villasimius es su Museo Arqueológico, en el que se pueden ver algunos de los muchos restos prehistóricos que han sido hallados en la zona, sobre todo en el asentamiento fenicio de Cuccureddus.

Muy cerca de esta localidad sarda está la Tumba de los Gigantes, un monumento megalítico funerario que está integrado por dólmenes y menhires que se remontan a la Edad de Bronce.

Pero lo que más llama la atención en esta población italiana son sus 32 kilómetros de costa, en las que se encuentran ubicada 20 de las mejores playas de toda Europa. Y para mejorar esta oferta, el espectacular entorno natural, que se extiende desde la Cordillera de los Siete Hermanos (Sette Fratelli) hasta las costas del Cabo Carbonara.

Cosas que hacer en Villasimius

Tras recorrer el pueblo de Villasimius y visitar sus playas, llega el momento de recobrar fuerzas con la rica gastronomía de la isla de Cerdeña. Pero esta población es conocida especialmente por su producción de miel y de vino, y por especialidades como las sardi amaretti o galletas de almendra y el formaggelle, un dulce típico de la isla que se prepara con queso ricotta, el cual se elabora con leche de oveja.

Tras una buena comida estaremos preparados para disfrutar de los bellos parajes de la zona, a pie o en bicicleta, y para practicar en sus costas diversas actividades náuticas, como la pesca o la vela. Y si visitas este municipio en los meses de verano, comprobarás que hay todo tipo de eventos, como festivales musicales, actos folclóricos o actividades gastronómicas.

Uno de los parajes más bellos de la costa local es el Cabo Carbonara, considerado el lugar menos lluvioso de toda Italia. Se trata de una zona marina protegida en la que conviven un gran numerosos peces, además de ser el hábitat del molusco bivalvo más grande del Mediterráneo, la nacra (pinna nobilis). Fuera de este ecosistema protegido se puede practicar sin problemas la pesca submarina.