La villa mediterránea de Palermo, en Sicilia
Por su clima, su mar, sus playas, sus paisajes, su gastronomía o su patrimonio monumental, Palermo es un estupendo destino durante todo el año en la isla de Sicilia.
Palermo es la ciudad más importante de la isla italiana de Sicilia, y ejerce como capital de la región autónoma de Sicilia y de la provincia de Palermo. Además posee un magnífico patrimonio monumental y una buena oferta cultural y gastronómica. También cuenta con una estupenda zona de costa, donde encontraremos largas playas donde nadar, tomar el sol o practicar deportes náuticos. Si prefieres bucear, podrás hacerlo en la cercana isla de Ustica.
Esta luminosa y populosa villa mediterránea posee una milenaria historia. De ello dan testimonio una gran cantidad de edificios de distintos estilos y edades. En Palermo podremos ver casas de estilo Art Nouveau, árabe o normando, además de iglesias barrocas y varios edificios neoclásicos.
Su clima de tipo mediterráneo es otro de sus atractivos. El calor es casi continuo a lo largo de todos los meses del año, además de contar con una elevada humedad ambiental en la época estival. La temperatura media en verano es de 26 grados centígrados, superándose fácilmente los 30 grados. En invierno, el termómetro suele rondar una temperatura mínima de 10 grados de media.
Visitando Palermo
El paso de las sucesivas civilizaciones por Palermo ha dejado su huella. En la ciudad confluyen una gran variedad de estilos, como medieval, barroco, del norte de África o del norte de Europa, entre otros. Pero el carácter de esta ciudad ha sabido preservar su identidad, siendo en el fondo esencialmente italiano.
La visita a la villa debe incluir las Catacumbas de los Capuchinos, que acogen varias momias; la catedral, que es de estilo árabe-normando; alguna de sus numerosas iglesias, como como la Martorana, la de San Cataldo, la Iglesia de San Juan de los Eremitas, la Iglesia de San Ignacio, la Iglesia de San Francisco de Asís o la Iglesia de San Giuseppe dei Teatini; el Palazzo dei Normanni, la Casa Professa, los teatros Politeama y Massimo, los Quattro Canti, la fontana Pretoria o la playa de Mondello.
La oferta museística local es realmente buena, contando con joyas como el Museo Arqueológico, la Galería Regional de Sicilia o el Museo Internacional de Marionetas.
Comer en Palermo
Estamos en Italia, y la cocina de Palermo, aunque con sus propias peculiaridades, es de los más italiana. Entre los platos más tradicionales se encuentran el pani ca' meusa, un bocadillo de menudillos de ternera; los arancini de arroz, la pasta con sardinas, los aneletti al horno, el atún a sfinciuni, los spaghetti alla carrettiera, la sopa de pescado all'ustichese, la pasta cchi masculinos, las sardinas a beccafico, el atún encebollado, el atún al ragú, la pescadilla a la palermitana o el caldo de pescado con attuateddi, una variedad de pasta.
Los más golosos disfrutarán con delicias como las cassate, los cannoli, los frutos de Martorana o los mostachones. Para beber, nada mejor que los vinos locales, como el Cuervo de Casteldaccia o el Partinico.
Otras propuestas en Palermo
En Palermo también se puede disfrutar de preciosos parajes naturales por los que practicar el senderismo o hacer buenas fotografías, como el Parco delle Madoni, un bello parque natural.
Para los amantes del turismo termal, la ciudad dispone de los centros termales de Termini Imerese y de Sclafani Bagni, donde ofrecen todo tipo de tratamientos y programas regeneradores.
En cuanto al calendario de eventos, incluye citas imprescindibles como la fiesta de Santa Rosalía o la carrera Targa Florio, ambas en el mes de julio.